La sublimación es un proceso químico en el que una sustancia pasa directamente de estado sólido a estado gaseoso, sin pasar por el estado líquido intermedio. Este proceso se utiliza para la producción de algunos productos, como tinta para impresoras y ciertos productos farmacéuticos. Existen varias formas de clasificar la sublimación, que incluyen el tipo de sustancia sublimada, la temperatura del proceso y la presión atmosférica.
Tipo de sustancia sublimada
La sublimación se clasifica en función del tipo de sustancia que se sublima. Las sustancias más comunes que se subliman son el iodo, el benceno, el cloruro de hidrógeno, el monóxido de carbono, el nitrógeno, el etileno, el acetato de vinilo y el sulfuro de carbono. Las sustancias más comunes que se subliman a temperaturas más altas son el ácido sulfúrico, el sulfuro de hidrógeno, el nitrato de plata, el sulfato de hierro y el ácido clorhídrico.
Temperatura del proceso
La temperatura del proceso es otro factor importante para clasificar la sublimación. La temperatura de sublimación varía según el tipo de sustancia sublimada. Por ejemplo, el iodo se sublima a temperaturas entre 115 y 184 grados Celsius, mientras que el benceno se sublima a temperaturas entre -80 y -90 grados Celsius. Además, hay algunas sustancias que pueden sublimarse a diferentes temperaturas. Por ejemplo, el cloruro de hidrógeno se sublima a temperaturas entre -40 y -60 grados Celsius, mientras que el monóxido de carbono se sublima a temperaturas entre -190 y -200 grados Celsius.
Presión atmosférica
La presión atmosférica también se considera al clasificar la sublimación. La presión atmosférica influye en la temperatura de sublimación de una sustancia. Por ejemplo, la temperatura de sublimación del iodo disminuye a medida que la presión atmosférica aumenta. Esto significa que el iodo se sublima a una temperatura más baja a mayor presión atmosférica. Por otro lado, la temperatura de sublimación del benceno aumenta a medida que la presión atmosférica disminuye. Esto significa que el benceno se sublima a una temperatura más alta a menor presión atmosférica.
Clasificación de la sublimación
En conclusión, la sublimación se clasifica en función del tipo de sustancia sublimada, la temperatura del proceso y la presión atmosférica. Estos tres factores influyen en la velocidad y la eficacia del proceso. Por lo tanto, es importante tener en cuenta estos factores al diseñar un proceso de sublimación.
Sublimación según el tipo de sustancia
- Iodo: 115 – 184 °C
- Benceno: -80 – -90 °C
- Cloruro de hidrógeno: -40 – -60 °C
- Monóxido de carbono: -190 – -200 °C
- Nitrógeno: -196 °C
- Etileno: -103 °C
- Acetato de vinilo: -78 °C
- Sulfuro de carbono: -60 °C
Sublimación según la presión atmosférica
- A mayor presión, menor temperatura de sublimación
- A menor presión, mayor temperatura de sublimación